DJ

Review del controlador Numark NV

03/11/2014 por Teo Tormo

En julio de este año, Numark logró protagonizar uno de sus “adelantamientos por la derecha” a los que ya nos tiene acostumbrados a los especialistas en tecnología para DJs. Mientras todos esperaban que Native Instruments anunciara públicamente en algún momento un controlador para Traktor Pro con pantallas integradas al estilo de Maschine Studio, Numark aprovechó para sorprender a todo el mundo con su nuevo controlador NV, un controlador orientado a ser empleado con Serato DJ que integra dos pantallas a todo color de 4.3, 16 pequeños pads con iluminación RGB y potenciómetros con respuesta táctil.

No es la primera vez que aprovechando el hecho de que la mayoría de la gente está pendiente de otras marcas, Numark sorprende a todo el mundo sacando un poco antes que el resto un producto que integra lo que otros esperan ver en esas marcas. Hace años lanzó el iCDX, un reproductor con capacidad para reproducir desde dispositivos de almacenamiento USB, efectos y control MIDI, y lo hizo un año antes de que Pioneer lanzara su CDJ-400. Ha sido también la primera marca en lanzar controladores con jogwheels motorizados, lo ha hecho con el V7, el NS7 y el NS7-II. Y también la primera en integrar pads (que no botones grandes) con iluminación RGB en un controlador barato, el Mixtrack Pro II. Ahora son los primeros en lanzar un controlador para DJs con doble pantalla a color integrada –el Stanton SCS4.DJ no lo podemos tener en cuenta por ser la reproducción autónoma su principal orientación– y habrá que ver si ser los primeros en algo tan concreto les proporciona alguna ventaja. Hemos podido probar una unidad del controlador Numark NV, y esto es lo que nos ha parecido.

Diseño y construcción

El NV está fabricado principalmente de plástico con un acabado en pintura negra mate bastante elegante y con un tacto suave y agradable. La parte central, donde se ubican los controles de mezcla, emplea un acabado “glossy” (probablemente metacrilato) muy similar al que pone ahora Native Instruments en muchos de sus aparatos. Ya sabemos lo bonito que queda ese acabado, y lo bien que quedan tus dedos marcados. El plástico no parece suponer un problema de construcción, todo parece perfectamente ensamblado, no hay partes que parezcan sueltas o que emitan crujidos al manipular el dispositivo.

Tiene un tamaño de 55cm de largo por 34 de ancho, ocupa prácticamenten la misma superfície que el Numark N4. Es bastante ligero, sólo 3.2kg. Colocado sobre una mesa tiene una altura relativamente baja a pesar de las 4 patitas de goma de la parte inferior, quedando los controles a unos 3cm de altura sobre la superficie en la que lo ubiques. La altura total del aparato es de 5.4cm. Esto por una parte es una ventaja, a menor grosor del aparato es evidente que mejora su portabilidad, pero si lo tienes montado en un setup con otros equipos de altura standard a los lados, el aparato da la sensación de quedar “hundido”; no obstante, el NV es un aparato destinado a gente que probablemente sólo usará el NV. Las esquinas redondeadas del diseño me gustan, odio darme golpecitos con las esquinas angulosas de los aparatos y pasarme 10 minutos acordándome del diseñador industrial que lo ideó.

En los laterales del NV tenemos los controles físicos completos para dos decks y dos bancos de efectos y en la parte central los controles de mezcla físicos de 4 canales. Aunque los controles son para dos decks, podemos controlar 4 empleando el botón rotulado como “Deck” que hay en la parte superior de cada juego de controles. Los controles de cada deck incluyen:

  • Pantalla a todo color de 4.3 pulgadas que muestra información de la pista en reproducción así como información del estado de algunos controles y funciones como los efectos, pitch o hotcues. También permite navegar por la librería.
  • 9 botones y un encoder alrededor de la pantalla para activar diversas funciones y pasar entre diferentes visualizaciones en la pantalla. El encoder principalmente es para la navegación por la librería.
  • 4 potenciómetros y 4 botones para controlar la activación y regulación de efectos.
  • Control de pitch de 100mm, de movimiento muy suave.
  • Jogwheel de 10.5cm de diámetro, con un aro externo de plástico con pintura gris metalizada y la parte superior de aluminio. El jogwheel es bastante ligero y gira con mucha facilidad. Junto a los jogwheels tenemos botones para activar el modo scratch y para activar el modo de reproducción inversa.
  • En cada deck tenemos un botón distinto para la activación de las diferentes funciones táctiles de los potenciómetros. En el deck izquierdo está el botón que activa las funciones táctiles en efectos y EQ, mientras que en el derecho las funciones táctiles en el filtro.
  • Abajo tenemos los controles de transporte, Cue, Play y Sync, con acabado en pintura metalizada y caractereres retroiluminados, muy al estilo Pioneer.

Junto a los controles de transporte, tenemos los 8 pads con iluminación RGB. Son pequeños, para que os hagáis una idea, de 20x15mm, con la parte translúcida alrededor (por encima la goma va pintada de negro) y algo duros. Por su dureza recuerdan a los empleados en el MPC Element (no sería extraño dado que Numark y Akai Pro pertenecen ambas al grupo InMusic) aunque obviamente más pequeños. Sobre los pads hay cinco botones de goma para elegir el modo de funcionamiento de los pads: Cues, Auto (loops automáticos), Loop (para disparar loops guardados), Sampler y Slicer. A la derecha de los pads tenemos dos botones para el pitch bend y dos botones para ajustar parámetros de las funciones que realizan los pads.

Todos los botones son de plástico a excepción de los que hay sobre los pads que son de goma. El click de los botones es algo duro, algo que por una parte puede parecer incómodo pero que por otra suele ser indicativo de buena durabilidad. Casi todos los botones tienen retroiluminación en rojo de una luminosidad bastante agradable, y digo casi porque los botones que hay junto alrededor de las pantallas no tienen iluminación alguna y en condiciones de baja luminosidad o te acuerdas de memoria de lo que hace cada uno o quizá tengas un problema.

En la parte frontal tenemos la doble salida de auriculares, con conectores de ¼ y ⅛ de pulgada. En el extremo opuesto a estos conectores tenemos los controles de volumen y mezcla de auriculares. Es una posición que personalmente no me gusta para este tipo de controles, siempre he preferido tenerlos en la parte superior del mixer o controlador, especialmente si es un aparato de altura inferior a la standard y encima tienes los dedos/manos grandes.

En el centro del dispositivo tenemos los controles de mezcla donde podemos encontrar:

  • Potenciómetros para ganancia, 3 bandas de EQ y control de filtro por canal. Los potenciómetros de filtro son notablemente más grandes que el resto. Tienen una resistencia adecuada al giro, ni mucha ni poca. Los capuchones no tienen la cobertura “gomosa” que tanto gusta a los DJs, aunque quizá eso haya sido necesario para mantener las propiedades táctiles.
  • La capacidad táctil no está en los capuchones, está en la propia pieza metálica del potenciómetro –puedes retirar el capuchón y comprobarlo–, así que puedes poner otros capuchones que te gusten más, aunque puedes perder las propiedades táctiles totalmente o que fallen ocasionalmente. Probé con dos tipos de capuchones de otros controladores, con resultados desiguales.
  • Cada canal tiene vúmetros de 5 segmentos, los 3 primeros en verde, luego uno en naranja y otro en rojo. No tienen ninguna referencia o tabla numérica –no pasa nada, “cualquier” DJ sabe que rojo es igual a muerte– aunque lo cierto es que son muy elegantes porque… ¡no se ven! Quedan ocultos bajo el metacrilato y sólo los ves cuando se iluminan. El Master tiene también su propio vúmetro de 5 segmentos, aunque doble.
  • Cada canal tiene también dos botones para asignar el banco de efectos al que queda vinculado, y un botón para la preescucha. También interruptores metálicos para seleccionar el lado del crossfader al que queda asignado el canal
  • Faders de 50mm para el volumen. Nada destacable, son de gama “media” y tienen una respuesta adecuada, con poca resistencia al movimiento. Llevan el típico capuchón finito de plástico negro que Numark emplea desde hace muchos años.

El crossfader según Numark es de grado “profesional”. De todos modos al probarlo te das cuenta que no es un CP-Pro, su mejor crossfader, una lástima. ¿Motivo? Yo diría que el CP-Pro no cabe en este controlador. El crossfader no obstante, aunque no tiene la suavidad del CP-Pro tiene un cutlag bastante bajo y es más suave que los de algunos controladores más caros que he probado. Además se puede reemplazar y estoy prácticamente seguro de que se puede meter un Mini-Innofader PNP, para que los que busquen experiencias más cercanas al turntablism no tengan queja. Hay un interruptor que permite elegir entre curva de mezcla standard y corte de scratch, no hay otro tipo de regulación posible. También tenemos interruptores para activar la función de Crossfader Start en los canales asignados a cada lado del crossfader. Todos estos interruptores son metálicos.

En la parte superior tenemos un interruptor para elegir la fuente de la entrada auxiliar, que puede ser micro o línea. En la parte trasera del dispositivo tenemos las conexiones de la entrada auxiliar, que son RCA cuando queremos conectar algo a nivel de línea y jack para el micro. Tenemos un potenciómetro para el nivel de la entrada auxiliar y otro para el tono que sólo funciona con la entrada de micro. Es importante destacar una peculiaridad de esta entrada auxiliar: su señal en ningún momento es ruteada al interior del ordenador, es decir, no funciona como entrada de la interfaz de audio, de hecho la interfaz del controlador como tal no tiene ninguna entrada física, sólo salidas. Por tanto la señal nunca pasa por Serato DJ, ni puede grabarse; es más, ni tan siquiera puedes monitorizar la señal por auriculares. Así que, ¿cuál es la finalidad de esta entrada? En mi opinión la entrada de micro está para hacer las típicas intervenciones de DJ animador de fiesta, y la señal de línea está ahí “por si todo falla”, es decir, si se te cuelga Serato DJ o el ordenador, el controlador puede quedarse encendido mientras reinicias y puedes tener algo sonando y conectado a esa entrada para que no haya un silencio total.

Bajo los controles de la entrada auxiliar tenemos una línea horizontal de indicadores luminosos de color rojo, salvo el central que es blanco. Estos indicadores sirven para indicar el descuadre de tempo entre los decks, pero ojo, sólo indican el descuadre de tempo, no indica si las canciones están o no acompasadas.

En la parte trasera del controlador, además de las entradas auxiliares antes mencionadas, tenemos una salida master balanceada en formato XLR y otra no balanceada en formato RCA, así como una salida booth de monitorización en cabina en formato RCA. También tenemos la conexión para el transformador de alimentación, el botón de encendido y la conexión para el puerto USB. El transformador de 12V es necesario usarlo y viene incluido, también viene un cable usb.

Respecto al diseño del aparato me gustaría añadir que me ha parecido un poco extraño que algunos elementos hayan sido dispuestos de manera simétrica mientras que otros de manera asimétrica. Me explico; a la hora de diseñar la disposición de los controles de los decks en este tipo de controladores para DJs, normalmente los fabricantes tienes dos opciones, o bien diseñan la parte de los decks como si fueran dos reproductores independientes y en ambos lados tenemos los controles dispuestos de la misma manera –la DDJ-SZ podría ser un ejemplo de eso– o bien diseñan el aparato alineando los controles de dentro hacia fuera, simétricamente, de manera que si “doblaras” el controlador por la mitad, los controles coincidirían. En el NV han optado por “fusionar” ambos conceptos. Por una parte los controles de transporte, pitch, opciones de jogwheel, opciones táctiles, los botones Shift... están colocados de manera simétrica, pero los botones de asignación de función en los pads no. Hasta aquí esto es comprensible, no deja de ser un bloque concreto de funciones, quizá cambiar su orden en cada lado sería lioso… pero en los controles de los efectos hacen lo mismo, los colocan de manera asimétrica. Los controles alrededor de las pantallas también se ubican de manera asimétrica. Todo esto al principio se hace un poco raro, y aunque te terminas acostumbrando, cuesta un poco más de lo habitual.

Instalación

El NV es class compliant y no necesita drivers ni en OSX ni en Windows. Es reconocido como un dispositivo de audio de 4 salidas, siendo la 1 y 2 las salidas Master y Booth y la 3 y 4 las salidas de auriculares. El interfaz es de 24 bits y su sample rate está fijo a 48khz. Puesto que además está diseñado para ser usado con Serato DJ, que emplea su propio sistema de gestión del interfaz de audio, tampoco es necesario en Windows instalar ningún driver ASIO. No obstante, si necesitas ASIO para emplear el NV con un software distinto de Serato DJ, como por ejemplo Traktor, puedes usar los ASIO4All. No hay problema en mapear los controles con otros programas, debes hacerlo a través del puerto MIDI que te aparecerá como NV Control. Eso sí, las pantallas no pueden usarse en ningún software que no sea Serato DJ.

La última versión de Serato DJ –al escribir esto la 1.7.1– se descarga gratuitamente de la web de Serato y la licencia se activa automáticamente al reconocer el dispositivo. Viene además un cupón con un código promocional para poder descargar gratuitamente la expansión Flip, de la que ya os hablamos en este artículo. Aunque el controlador puede controlar las funciones de Flip desde los pads y los controles adyacentes, esas funciones no vienen rotuladas en el controlador. Al parecer la decisión de que el controlador soportara estas funciones se debió de tomar después de que se diseñara el aparato. No obstante Numark ha publicado en su web un vídeo donde explica perfectamente cómo acceder a los bancos de Flip, que simplemente es pulsando Shift+Cues, y activar y desactivar la grabación de los flips, que es con los botones de Parameter Adjust.

En uso

El Numark NV se comporta muy bien con Serato DJ y el ordenador con el que habitualmente hago las pruebas, un Mac Mini con procesador i5 y 4gb de RAM. Con la latencia de Serato DJ a 2ms no hay ni una sola interrupción en el audio ni artefactos sonoros extraños, y el sonido es muy bueno, con bastante pegada y definición. Dado el espacio disponible para ubicar los controles de mezcla, lo cierto es que tanto el tamaño de los controles empleados como su ubicación y separación está bastante bien ajustado. No se hace incómodo ni para una persona con las manos grandes como yo.

Los jogwheels se comportan de manera bastante precisa, algo habitual en los controladores compatibles con Serato DJ, pero hay que usarlos con suavidad. Son pequeños y ofrecen muy poca resistencia al giro, así que debes hacer movimientos muy precisos. Los expertos turntablistas seguro que lograrán sacar algún scratch interesante, pero los que no somos muy expertos en esas lides no encontramos en este tipo de jogs un aliado. Para cosas como pitchbend, ajustar puntos de loop o cues, cumplen su papel a la perfección. Y el color metálico es bonito.

Los pads son duros y es necesario acostumbrarse a esa dureza. Por la respuesta que tienen diría que son del mismo tipo que los que monta Akai Pro actualmente en sus controladores de gama media, lo cual no está nada mal. Esta dureza en los pads tan típica de Akai tiene una ventaja, y es que accidentalmente no vas a disparar un cue o un loop roll. Esto, que dicho así parece una simpleza, es bastante relevante si tienes en cuenta que los pads están debajo del jogwheel y al lado de los controles de transporte, una zona sobre la que tu mano va a pasar mucho por encima. Como los pads son sensibles a la velocidad, puedes usar el sampler SP-6 de Serato DJ de manera que según lo fuerte que golpees, se regula el volumen al que se dispara la mezcla, algo que puede ser interesante si te pones a hacer cosas como disparar algo de percusión en directo.

Respecto a la cualidad táctil de los potenciómetros, decir que tiene un uso interesante. Es algo que puedes tener desactivado y activar sólo cuando quieras y sólo determinados grupos de potenciómetros. Por ejemplo si lo activas sólo en los efectos, los efectos se activarán al tocar el potenciómetro que los regula y se desactivarán al soltarlo. Si lo activas en la sección de mezcla, los controles de EQ hacen kill instantáneo de la banda del control que toques, y recupera la posición en la que estuviera seteado al soltar.

Pero probablemente la función que mayor curiosidad desate, son las pantallas. Para los curiosos e impacientes adelantaré algo: sí, molan mucho y facilitan el workflow; y sí, permiten prescindir del ordenador en la mayoría de situaciones, aunque no en todas. Para los que quieran detalles, os los cuento así:

  • Las pantallas tienen un tamaño de 4.3 pulgadas. No se ha publicado dato alguno de su resolución, pero es suficientemente buena para el tipo de datos y gráficos que ofrecen. Las clásicas formas de onda de Serato se ven bien en esas pantallas, y cuando se desplazan la animación es suave. Tienen bastante brillo, aunque no es regulable. La inclinación que tienen es sencillamente fantástica y hacen que puedas trabajar bien con el controlador desde muchas posiciones diferentes, de pie o sentado.
  • Tienen 3 modos de visualización, el modo librería, donde navegamos entre todos nuestra música, crates y playlists de iTunes, y dos modos de pista. En los dos modos de pista vemos siempre la representación vista global de la forma, posición de reproducción y hotcues, pero en uno vemos el típico “reloj” de Serato con la representación virtual del disco giratorio, BPM en grande, tiempo, rango de pitch… y en el otro modo de pista no visualizamos el disco giratorio, los datos aparecen distribuidos de otra forma, y tenemos una representación en detalle de la forma de onda. Llos efectos seleccionados (en cada pantalla vemos un banco) y sus niveles, aparecen siempre en la parte inferior en los dos modos de pista.
  • Se puede alternar entre los tres modos de pantalla pulsando el botón D.View, pero también se accede directamente al modo librería al girar el encoder, y se vuelve al modo pista con forma de onda detallada al cargar una canción.
  • Ciertamente si tienes tus temas preparados y bien clasificados te puedes olvidar de mirar la pantalla del ordenador para pinchar prácticamente todo el rato.
  • En el modo librería, cuando visualizamos un crate o un playlist podemos ver los datos de título, artista y BPM. No se puede ver ningún otro dato que podría ser útil para el DJ como tonalidad o álbum. También es una lástima no poder ver el artwork.

Aunque en el controlador hay controles para editar los beatgrids de las canciones, esa edición no puede hacerse en las pantallas, debes mirar la pantalla del ordenador porque en las pantallas del NV no aparecen los beatgrids. Esto es algo que creo que Numark podría y debería solucionar en alguna actualización de firmware, especialmente cuando habla de su controlador como algo que sirve para olvidarse de la pantalla del ordenador. Es cierto que editar beatgrids es algo para lo que quizá a veces ni enciendas el controlador y lo hagas en modo offline, pero creo que no aprovechar las pantallas para esto es una pena además de una incoherencia con su marketing. También es una lástima que las pantallas no puedan aprovecharse con Serato Video para previsualizar tus vídeos, pero esto quizá es pedirle peras al olmo, no tengo claro si enviar tanta información por el puerto USB sería posible.

Algunas conclusiones

El NV es interesante para los DJs digitales que quieren emplear un único controlador con cierta calidad, con el que lo puedan hacer todo y que sea compatible con todas las funciones de Serato DJ.

No es complicado ni pesado de transportar, y junto a un ultrabook actual tipo Macbook Air, hace una pareja mortal. Las pantallas son un aliciente muy interesante, ayudan a encontrar un workflow similar al que aportan los reproductores independientes… pero con las ventajas de disponer del ordenador en cualquier momento. Esto es algo que sencillamente a algunos gustará y a otros no, y prácticamente darán igual los esfuerzos que puedan hacerse con marketing, habrá gente que verá interesante este tipo de aparatos per se, y otras personas jamás los entenderán o serán de su gusto.

Es importante por otra parte indicar el hecho de que también controladores como el NV suponen una cierta ruptura con los controladores “del pasado”. Hasta ahora podías comprar un controlador, y aunque estuviera diseñado específicamente para un determinado software, siempre podías remapear sus controles en otro software y hacerlo funcionar. Pero con el NV es distinto; las funciones de las pantallas, uno de sus principales atractivos y que da sentido al dispositivo, son exclusivas de Serato DJ, así que si te compras el NV es porque tienes claro que quieres pinchar con Serato DJ. Algo similar sucede con otro de los controladores que acaba de llegar al mercado, el S8, que también incorpora pantallas para ser usadas de manera exclusiva con Traktor.

Aparte de las virtudes del NV, hay que tener en cuenta también sus limitaciones a la hora de valorarlo. No podremos usarlo para hacer mezclas con fuentes externas –lo de la entrada auxiliar ya hemos explicado hasta donde llega– ni como mixer independiente, así que todo lo que hagamos gira en torno a lo que saquemos de Serato. Y sus pantallas, aunque nos servirán de gran ayuda, están pidiendo una pequeña actualización de firmware que nos permita visualizar algunas cositas más como los beatgrids o más información de la música antes de cargarla.

El precio de 720€ al que se comercializa no me parece malo para la gran cantidad de funciones que ofrece y viniendo con una licencia completa de Serato DJ y la expansión Flip. Tiene muchas posibilidades creativas gracias los pads y a los potenciómetros táctiles, todo depende de lo que quiera investigar el DJ. Su construcción a pesar de llevar mucho plástico es bastante buena. Estoy seguro de que si sus ventas no son malas veremos evoluciones de este controlador de Numark, así como versiones “superiores” con acabados y componentes algo mejorados. Creo que tendremos pantallas integradas para rato.

Lo mejor:

  • Muchas funciones de control concentradas en un mismo aparato.
  • Incluye licencia completa de Serato DJ y la expansión Flip.
  • Construcción bastante lograda a pesar del plástico.
  • Pantallas geniales, mejoran mucho el workflow.
  • Potenciómetros táctiles y de buen tacto. Sección de mezcla muy decente.

Lo peor:

  • Podrían haberle sacado un poquito más de partido a las pantallas.
  • La entrada auxiliar es bastante inútil.
  • Extraña distribución de algunos controles.
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