Magacín

Un prisma acústico capaz de abrir el arco iris sonoro

02/12/2016 por Pablo Fernández-Cid Actualizado el 03/12/2016

Las gotas de lluvia actuando como prismas descomponen la luz y separan sus distintas longitudes de onda caracterizadas por diferentes colores. Ahora una flauta mágica que actúa como prisma acústico lo consigue sobre el sonido y sus frecuencias.

La 'flauta mágica' y su patrón de radiación para distintas frecuencias
2016 Acoustical Society of America [http://dx.doi.org/10.1121/1.4949544]

En verano se publicaba en el Journal of the Acoustical Society of America un artículo de un grupo de autores desde la Escuela Politécnica Federal de Lausanne (Hussein Esfahlani, Sami Karkar, Hervé Lissek y Juan R. Mosig). Aunque no es realmente la primera referencia a este tipo de técnicas, sí ha traspasado el circuito académico / investigador y encontrado presencia en medios más divulgativos.

Artículos anteriores de estos mismos y otros autores planteaban sin necesidad de electrónica y por medios puramente mecánicos / acústicos, el diseño de una especie de tubo que es capaz de separar espacialmente las distintas señales sonoras que constituyen cualquier sonido complejo y que residen en frecuencias diferentes, abriendo a partir del audio un arcoiris sonoro. Formado por varias secciones acopladas y con agujeros, externamente su aspecto recuerda en cierta forma al de un instrumento de viento.

Se trata de aprovechar los fenómenos de propagación y refracción de ondas, los mismos que las gotas de agua y los prismas ópticos aprovechan para descomponer la luz, y que su tubo consigue trasladar a las ondas acústicas. Su diseño aprovecha la interacción del sonido con las paredes y membranas internas del tubo, que forman guía-ondas y obstáculos específicamente definidos para conseguir esa 'magia' del filtrado espacial/mecánico sin voltios ni amperios ni cables de ningún tipo, ni tampoco invocando los cálculos avanzados que implica una FFT típica de los analizadores de espectro y los programas de ordenador. Pero con el resultado de constituir una suerte de banco de filtros estrictamente acústico, del que en diferentes direcciones emanan las distintas bandas de frecuencia sonora presentes en el sonido originalmente introducido.

Las secciones que componen el tubo y la membrana que los separa
2016 Acoustical Society of America [http://dx.doi.org/10.1121/1.4949544]

De hecho el artículo publicado en junio con título "Exploiting the leaky-wave properties of transmission-line metamaterials for single-microphone direction finding" trata del fenómeno contrario: usar el tubo no para reproducir a su través sonido, sino como 'captador' de sonido que, incorporando un único micrófono interno, es capaz de averiguar en qué dirección han llegado los estímulos sonoros, sin acudir a los arrays microfónicos ni otras estrategias.

Detalles del diseño interior
2016 Acoustical Society of America [http://dx.doi.org/10.1121/1.4949544]

Menos vistoso que el arco iris para el público en general, dado que no entra por los ojos, para nosotros en hispasonic, la idea sí es llamativa, dado que puede tener un interesante desarrollo en cuanto a la microfonía o también para lograr disponer de sistemas de filtrado/ecualización acústico al emanar del dispositivo en distintas direcciones cada una de las bandas, y como reza una máxima no escrita: lo que pueda obtenerse acústicamente no lo dejes para corrección en vía electrónica / software.

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