Si es para mover el piano entre casas diferentes, yo te diría que contrates a profesionales, tienen el equipo adecuado, y te llegará sin golpes y sin problemas.
Si lo vais a mover igualmente, el piano se tumba encima de un carro que aguanta muchos kilos para poder desplazarlo, el carro tiene que ser estable (que no se rompa), tanto si está el piano en posición normal como si está sobre su lateral se pone encima del carrito intentado no dejarlo ir de golpe claro.
Al piano no le pasa nada por estar tumbado sobre el lateral, pero no se debe desplazar arrastrándolo sin más. Y al mecanismo tampoco le pasa nada si se hace de manera correcta, si el piano se lleva movimientos bruscos y golpes pues puede pasar o no pasar algo, si no os fiáis podéis sacar el mecanismo y moverlo a parte, pero aún se os caerán las teclas o vete a saber, casi mejor que lo dejéis dentro todo sin tocar.
Y no lo mováis mucho con sus ruedecitas.
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#2 Muchas gracias por tu aporte, la verdad que el único momento que necesito tumbarlo es para meterlo en el montacargas, y ten claro que lo haremos con mucho mimo. simplemente no sabía si al ponerlo en esa posición se iba a descolgar algo del interior. Se del carro que me dices, nos haremos con uno este fin de semana. De nuevo gracias.
Un Saludo.
¿Como fue el traslado?
Se me olvidó poner lo más importante, mover un piano es peligroso para los que lo llevan, sobretodo si no es muy estable, si se hacen movimientos raros de girar o volcar, y especialmente en rampas y escaleras. Lo adecuado es que los traslados lo hagan especialistas.
#4 Pues ha ido muy bien. No fue tan difícil como me imaginaba. Teníamos a favor que los edificios contaban con puertas y pasillos amplios. Fue tan sencillo como montarlo al carro, volcarlo en el montacargas, volver a montar en el carro y ponerlo en su lugar. Se que los profesionales lo hacéis mejor, pero teniendo a favor tan pocas dificultades me atreví a hacerlo así y sin problemas. Es más, tengo la sensación que no se ha desafinado, de todas formas ya toca dale algún ajuste.
Muchas gracias