Sí, hombre, tranqui. Simplemente ten en cuenta lo que decía Mikolópez en #24 : no tiene la misma calidad la información que uno mismo lee o le dicen en internet que la que tiene un profesional de la materia desde la observación directa.
Es como diagnosticarse una enfermedad usando Google. No está mal informarse, buscar segundas o terceras opiniones, y a veces es cierto que damos con malos médicos en el centro de salud (o que tienen un mal día, que también tienen derecho). Pero supongo que coincidirás en que la probabilidad del diagnóstico sea acertado no es la misma. Es un mal de nuestra época: la sobreabundancia de información es positiva (hay más donde elegir), pero tiene también sus efectos indeseables (no todas las elecciones tienen la misma calidad, y a veces es difícil distinguirlo).
Ojo con los instintos propios, con los "sabios" de la web y con los objetivos que te planteas. Hay que considerarlo todo, claro, y es bueno ser crítico con los profesionales en los que confías, pero sin olvidar que nuestro criterio está menos fundamentado que el suyo, no sé si tú te habrás visto alguna vez en la situación opuesta con gente que tenga dudas sobre tu propio trabajo. Eso de que el cliente tiene siempre la razón tiene sus matices.
Lo mejor que puedes hacer con un profesional (profesor, médico, albañil...) es hablar muy claramente de los objetivos que quieres, de lo que estás dispuesto a hacer para conseguirlos y de cómo el profesional te puede ayudar, si puede. La buena comunicación es necesaria para establecer una relación de confianza. Y tener buenas referencias de su trabajo, como te dice Mikolópez.
#33
Entendido todo.
Y compartido.