Pues qué queréis que os diga. A mí sí me gustaría tener el derecho de llenarle el pecho de plomo a una banda de ladrones según asoman la patita por la ventana de mi casa. No hablo de un padre de familia parado y desesperado, sino de bandas organizadas que han convertido el crimen en su maravilloso oficio, tan asentadas ellas en España, paraíso de la convivencia y tal...

Qué clase y qué estilo tiene el jodío. Si es que en el fondo es un auténtico punkarra...
