A sin hache...
Laburo es un italianismo que me encanta de Argentina.
Si no te has percatado, para que no sea todo sacra faltas, tengo una ortografía que en argentino sería grafía del orto...entre errores dactilares (los más) y faltas (bastantes) paso muy por los pelos este paplel de censor gramatical que me he autoinvestido; pero que gustosamente cambio o comparto por simpatía, talento o conocimientos gramaticales, que aquí hay algunas buenas plumas (mejor que buenos con pluma).
Responder
Citar
Upsss, menuda falta!!!. Quería decir "A eso le llamo yo..." pero gracias Carmeloc.
Como decía el chiste:
Una chica le pregunta a un chico ¿Cómo te llamas? y el chico le contesta:
Follardo... digo Gerardo... en qué estaría yo pensando!!!
Responder
Citar
#48
+1
También detesto cuando se convierte en verbo la palabra "apertura". Cosas como "Voy a aperturar una cuenta en el banco" me desagradan a mas no poder.
Odio la palabra "homofobo". Pocas cosas son mas fastidiosas que un tonto que se queja de lo "homofoba" que es tal o cual cosa. Tambien detesto palabras como "fascista", "facha", "fariseo", "hipocrita"... se le usa en tantas situaciones que ya parecieran perder su significado.
Me fastidia que a los aparatos de ortodoncias, esos que toda la vida se le ha llamado "frenos", les llamen brakets. Palabras en ingles transformarlas al castellano y transformarlas en verbos: "Clockear", "Overclockear", "Butear", "Savear", "Openear".
Responder
Citar
No soporto cuando dicen "la clase política", o que definan a las personas como "intelectuales".
Vividores!!!
Responder
Citar
y ODIO esta frase:
"Por eso es que estamos como estamos".
Responder
Citar
#78
Creo que nos ha pasado a todos: lo de Follardo.
Responder
Citar
#80
Sí, como si fuera un Mercedes: el classe polítika (un monovolúmen all road tope guay).
Ahora que no está Ezequiel, vaya atajo de golfos, que diría
Responder
Citar
#81
Ciertas las dos aseveraciones: el postmodernismo no fue una moda pasagear (sobre todo en arquitectura, el post modern) es la vanguardia de uan cambio de era.
La segunda no tanto hacia el fascismo; porque aquello fue demasiado gracioso y social comparado con lo que viene, aquello tenía dentro a los futuristas a los ingenieros de la copa Schneider, a diseñadores de automóviles italianos y bastante glamour, no todo era Noveccento de Bertolucci; pero lo que viene: más toatalitarista: orwelliano, claro que muchos tenemos la certeza; bueno yo, más bien la cerveza, puesto que me estoy bebiendo una: una Ambar de las azules de tres maltas.
Responder
Citar
en una obra me toco trabajar con un encargado que me decia la palabra "Campeón" 50 veces al dia...
-que pasa campeón..
-ya te abro campeón..
-eso dejamelo bien campeón....campeón...campeón!!!!
era un tipo majo pero a veces daban ganas de asesinarlo.
Responder
Citar
No me gusta que seamos tan reacios a barbarismos cuando una gran parte de las palabras que usamos diariamente sin saberlo fueron barbarismos en su momento. Uy, que me voy de topic. digo de tema.
Responder
Citar
A mi no es que no me gusten ciertas palabras, es que no me gusta la gente que las dice. Ni la forma en que las dice.
Responder
Citar
#88
sivsfa, soy fan de tu último comentario.
Responder
Citar
#87
Totalmengte de acuerdo; pero hay que medir, dejarse violar con gusto, que parezca que te quieren, que es por amor.
Responder
Citar