Erica Synths Megarack, un pasote de mueble para Eurorack de 8x126 HP
Una de las cosas que más me gustan del NAMM Show es que muchos fabricantes se guardan sus juguetes más llamativos para estas fechas. Como parece que han hecho en Erica Synths con su última creación, que no es ni un módulo ni un sofisticado sintetizador, sino Megarack, que básicamente es... pues eso: un "megarack" en el que alojar tantos módulos de Eurorack como cabrían en un maravilloso paraíso modular. Bueno, igual tantos no, pero casi.
Erica Synths Megarack
Un metro de alto y 14,75 kg de peso son la carta de presentación de este imponente mueble para Eurorack que nos llega desde Erica Synths. Está fabricado en aluminio y cuenta con 8 hileras de 126 HP y una fuente de alimentación capaz de suministrar 12 amperios a +12V, y 6 amperios a -12V. El fondo útil disponible para alojar los módulos variará dependiendo de la posición elegida, con opciones 60 mm en las zonas menos profundas (por coincidir con las placas de distribución de potencia), otras de 80 mm, e incluso con algunas que llegan a los 120 mm en las hileras inclinadas.
Hay también dos conexiones XLR de 4 pines en las que se pueden conectar dos lámparas flexibles que ya os digo de antemano que no van incluidas, y básicamente poco más, porque tampoco deja de ser un mueble para módulos de Eurorack. Uno bastante grande, eso sí, y creado, en palabras de Erica Synths, "para aquellos que se toman en serio el Eurorack". Supongo que el eslogan de "para los que les sobra el dinero" ya estaba cogido.
Precio y disponibilidad
El nuevo Megarack ya está disponible en la página de Erica Synths y en algunos distribuidores habituales. El precio oficial de venta se ha fijado en 1750 € sin incluir impuestos. En tiendas se sitúa ligeramente por encima de los 2000 €. Una cifra nada despreciable, pero que para cualquiera que pueda permitirse llenar uno de estos será fácil de afrontar.
Más información: Erica Synths
En tiendas
- Erica Synths Megarack: 2039€ en Thomann
Comunicador incansable en materia de tecnología musical. Dicen por ahí que de niño se cayó en una marmita llena de osciladores de baja frecuencia.
