Buscando info sobre aracnofobia y el porque del miedo a este animalillo que en la gran mayoria de los casos no es ni siquiera peligroso (por lo cual no se entiende el porque tanto miedo...y eso que yo soy aracnofobico, pero las arañas sobretodo segun tamaño cuanto menos te dan cierto "respeto") encontre esta divertida historia/leyenda urbana sobre este aracnido...que ni siquiera es una araña..ala que lo disfruteis
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Hoy no hablaré de políticos sino de otros seres que me dan todavía más asco. Y es que en Nuestra caja de Pandora (muy recomendable blog, por cierto), he leído el testimonio de un soldado español destacado en Afganistán en el que describe la dureza de sus condiciones de vida en su destino actual.
Entre las muchas situaciones que cuenta, yo, Ernesto de la Serna, aracnófobo empedernido, me he quedado obsesionado con esto:
Pero si ese día los hados se levantan cruzados, puedes encontrarte con una araña-camello. Del tamaño de un plato de postre, tiene la particularidad de que ataca a lo que se le ponga por medio. Inyecta un potente anestésico que puede matar a un niño y que insensibiliza a un adulto para, mientras, írselo comiendo. Cuando está satisfecha, inyecta sus huevos dentro de la carne y se va. Su herida no es mortal, pero sí dificilísima de curar. Además, los huevos crecen dentro de la carne y cuando eclosionan generan nuevas situaciones similares, pues las crías se alimentan del huésped.
Cojonudo: un bicho más grande que tu pie, capaz de comérsete un cacho pierna y dejarte unas cuantas decenas (¿centenas?, ¿millares?) de huevillos que, al eclosionar, dejan salir decenas (¿centenas?, ¿millares?) de arañitas que proceden a seguir devorando lo que su madre dejó. Quienes me conocen imaginarán, con razón, que nada más leer esto me ha empezado a picar todo el cuerpo y he empezado a mirar angustiado bajo el teclado, bajo el ratón, bajo la mesa, esperando ver un ejército de arañas-camello dispuestas a anestesiarme, masticarme y usar mis carnes para la gestación de su siguiente generación.
Pese al terror fóbico, el afán de saber (o el morbo) ha podido más y he tratado de aprender más sobre este bicho siniestro y, hasta ahora, desconocido. Mi búsqueda me ha llevado a esto:
Corren a 17 Km./h, saltan hasta un metro, son arañas nocturnas, por lo que solo salen de noche, o al menos, a la sombra. Cuando te muerden, te inyectan Novocaína, con lo cual te quedas atontado inmediatamente. Ni siquiera te das cuenta que te están mordiendo mientras duermes, por lo que te despiertas con parte de tu pierna o brazo desaparecido puesto que han estado mordisqueándote durante toda la noche. Si estas caminando y sin querer derribas algo que esté aplicando una sombra sobre ellas, y el sol las toca, mejor corre. Ellas correrán inmediatamente a buscar tu propia sombra, chillando todo el tiempo mientras van persiguiéndote. (...). Estas arañas son las que se encuentran diariamente las tropas en Irak.
Lo mejor de todo es que con esto de la globalización, cualquier soldado proveniente de Irak, puede traerse una araña de estas resguardada en su mochila entre los calzoncillos usados (cualquiera que haya visto el clásico del cine de terror sobre arácnidos "aracnofobia" sabe que es muy posible que esto suceda), así que tened cuidado por las noches si notáis humedad en las sabanas, porque puede ser que vuestra propia sangre esté inundando la cama. (por no decir que si algún día vais corriendo por un sitio soleado y escucháis gritos de niños, mejor corráis sin mirar atrás, no vaya a ser que sufráis un ataque arácnido-camelloide)
Como dato curioso, decir que se llaman arañas camello porque trepan por las patas de los camellos y les trepan hacia la barriga donde se alimentan (a la vez que se resguardan del sol) hasta que los intestinos del camello se desprenden.
Enseguida he pensado en las tropas españolas que volvieron de Irak: ¿cuántos bichejos de éstos se habrán traído en sus mochilas sin darse cuenta?, ¿cuántos habrán llegado a esta ciudad?, ¿y a este barrio? ¿Y cuántos están esperando debajo de mi cama para anestesiarme y devorarme esta noche? Me parece que hoy no voy a pegar ojo...
http://viva-la-utopia.blogspot.com/2005 ... fobia.html
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Hoy no hablaré de políticos sino de otros seres que me dan todavía más asco. Y es que en Nuestra caja de Pandora (muy recomendable blog, por cierto), he leído el testimonio de un soldado español destacado en Afganistán en el que describe la dureza de sus condiciones de vida en su destino actual.
Entre las muchas situaciones que cuenta, yo, Ernesto de la Serna, aracnófobo empedernido, me he quedado obsesionado con esto:
Pero si ese día los hados se levantan cruzados, puedes encontrarte con una araña-camello. Del tamaño de un plato de postre, tiene la particularidad de que ataca a lo que se le ponga por medio. Inyecta un potente anestésico que puede matar a un niño y que insensibiliza a un adulto para, mientras, írselo comiendo. Cuando está satisfecha, inyecta sus huevos dentro de la carne y se va. Su herida no es mortal, pero sí dificilísima de curar. Además, los huevos crecen dentro de la carne y cuando eclosionan generan nuevas situaciones similares, pues las crías se alimentan del huésped.
Cojonudo: un bicho más grande que tu pie, capaz de comérsete un cacho pierna y dejarte unas cuantas decenas (¿centenas?, ¿millares?) de huevillos que, al eclosionar, dejan salir decenas (¿centenas?, ¿millares?) de arañitas que proceden a seguir devorando lo que su madre dejó. Quienes me conocen imaginarán, con razón, que nada más leer esto me ha empezado a picar todo el cuerpo y he empezado a mirar angustiado bajo el teclado, bajo el ratón, bajo la mesa, esperando ver un ejército de arañas-camello dispuestas a anestesiarme, masticarme y usar mis carnes para la gestación de su siguiente generación.
Pese al terror fóbico, el afán de saber (o el morbo) ha podido más y he tratado de aprender más sobre este bicho siniestro y, hasta ahora, desconocido. Mi búsqueda me ha llevado a esto:
Corren a 17 Km./h, saltan hasta un metro, son arañas nocturnas, por lo que solo salen de noche, o al menos, a la sombra. Cuando te muerden, te inyectan Novocaína, con lo cual te quedas atontado inmediatamente. Ni siquiera te das cuenta que te están mordiendo mientras duermes, por lo que te despiertas con parte de tu pierna o brazo desaparecido puesto que han estado mordisqueándote durante toda la noche. Si estas caminando y sin querer derribas algo que esté aplicando una sombra sobre ellas, y el sol las toca, mejor corre. Ellas correrán inmediatamente a buscar tu propia sombra, chillando todo el tiempo mientras van persiguiéndote. (...). Estas arañas son las que se encuentran diariamente las tropas en Irak.
Lo mejor de todo es que con esto de la globalización, cualquier soldado proveniente de Irak, puede traerse una araña de estas resguardada en su mochila entre los calzoncillos usados (cualquiera que haya visto el clásico del cine de terror sobre arácnidos "aracnofobia" sabe que es muy posible que esto suceda), así que tened cuidado por las noches si notáis humedad en las sabanas, porque puede ser que vuestra propia sangre esté inundando la cama. (por no decir que si algún día vais corriendo por un sitio soleado y escucháis gritos de niños, mejor corráis sin mirar atrás, no vaya a ser que sufráis un ataque arácnido-camelloide)
Como dato curioso, decir que se llaman arañas camello porque trepan por las patas de los camellos y les trepan hacia la barriga donde se alimentan (a la vez que se resguardan del sol) hasta que los intestinos del camello se desprenden.
Enseguida he pensado en las tropas españolas que volvieron de Irak: ¿cuántos bichejos de éstos se habrán traído en sus mochilas sin darse cuenta?, ¿cuántos habrán llegado a esta ciudad?, ¿y a este barrio? ¿Y cuántos están esperando debajo de mi cama para anestesiarme y devorarme esta noche? Me parece que hoy no voy a pegar ojo...
http://viva-la-utopia.blogspot.com/2005 ... fobia.html
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