Aunque llevo tiempo registrado, no había participado aún. Me dedicaba a vigilar desde detrás del visillo, cual viejecita.
Bien, mi afición a la música me viene de muy pequeño, primero escuchándola desde que era un bebé, pues mi padre montaba equipos estéreo allá por los 70 y mi madre, en su papel de ama de casa, siempre tenía la radio o algún disco/cassette puesto.
Lo de interesarme por los instrumentos musicales vino algunos años después, cuando mi padre trajo a casa uno de aquellos tecladitos CASIO VL-1 con el que me inoculó el veneno. Tantos buenos recuerdos tenía de aquella época (sobre 1982) que, habiendo perdido el CASIO, no dudé hace un par de años en buscar otro igual y agenciármelo.
Luego, un día de 1983 que andábamos de visita por la capital, en un escaparate de una tienda vi el flamante YAMAHA DX-7 recién salido del horno, recuerdo también la etiqueta con su precio de 170,000 pesetas y me dije a mí mismo que tenía que tener uno y aprender a tocarlo. Así que a finales de año me apunté a clases de música y estuve unos tres años estudiando teoría musical. Desgraciadamente lo dejé y ya no me acuerdo de nada...
Hoy me acabo de comprar un flamante YAMAHA SY-77 (buscaba un DX-7, pero dentro de mi presupuesto no había nada que me convenciese y ha salido esta buena oportunidad por 400€). Me toca empezar de cero, no espero ser un Mozart, pero sí lograr cierta soltura y, de paso, aprender algo de todo este mundillo de los sintetizadores del que ahora mismo no entiendo ni papa.
Bien, mi afición a la música me viene de muy pequeño, primero escuchándola desde que era un bebé, pues mi padre montaba equipos estéreo allá por los 70 y mi madre, en su papel de ama de casa, siempre tenía la radio o algún disco/cassette puesto.
Lo de interesarme por los instrumentos musicales vino algunos años después, cuando mi padre trajo a casa uno de aquellos tecladitos CASIO VL-1 con el que me inoculó el veneno. Tantos buenos recuerdos tenía de aquella época (sobre 1982) que, habiendo perdido el CASIO, no dudé hace un par de años en buscar otro igual y agenciármelo.
Luego, un día de 1983 que andábamos de visita por la capital, en un escaparate de una tienda vi el flamante YAMAHA DX-7 recién salido del horno, recuerdo también la etiqueta con su precio de 170,000 pesetas y me dije a mí mismo que tenía que tener uno y aprender a tocarlo. Así que a finales de año me apunté a clases de música y estuve unos tres años estudiando teoría musical. Desgraciadamente lo dejé y ya no me acuerdo de nada...
Hoy me acabo de comprar un flamante YAMAHA SY-77 (buscaba un DX-7, pero dentro de mi presupuesto no había nada que me convenciese y ha salido esta buena oportunidad por 400€). Me toca empezar de cero, no espero ser un Mozart, pero sí lograr cierta soltura y, de paso, aprender algo de todo este mundillo de los sintetizadores del que ahora mismo no entiendo ni papa.
