No se nota un aumento de rendimiento tan espectacular como cuando se cambia de procesador o se aumenta memoria RAM, pero en alguna parte del proceso si debería alivianar las cargas de trabajo del procesador (ej. en la grabación y en la reproducción a altas resoluciones).
Donde si suele notarse el rendimiento de una tarjeta de sonido es en los juegos, donde es la misma tarjeta la que suele aplicar efectos complejos que un chip integrado difícilmente puede manejar.
Donde si suele notarse el rendimiento de una tarjeta de sonido es en los juegos, donde es la misma tarjeta la que suele aplicar efectos complejos que un chip integrado difícilmente puede manejar.
