Cuando la estrategia de Podemos se basó en un discurso moderado, se debería haber puesto en manos de Errejón y no de Iglesias ya que son perfiles distintos y casas más con uno que con otro.
Mientras Pablo llamaba a los políticos de siempre "casta", los votantes veían en él a alguien que iba a destapar la fosa séptica de las triquiñuelas que, congratulémonos, destapan en lo posible y pese a todo nuestros cuerpos de seguridad apoyados por la justicia,, aunque falten más apoyos y ese se esperaba que fuera el papel de Podemos mientras no se anduvo por las ramas.
Pero Iglesias bajó el tono, se etiquetó como socialdemócrata lo que el votante interpretó como "se está volviendo casta", ensalzó la figura de Zapatero cuando creo que no hay español que no le consideré un pésimo presidente pese a algunos cambios notables que introdujo... mezclados con otros fallos garrafales.
Y por último Podemos va y saca un catálogo "a la sueca", símbolo inequívoco de una sociedad de consumo y no de una sociedad justa e igualitaria.
Mientras Pablo llamaba a los políticos de siempre "casta", los votantes veían en él a alguien que iba a destapar la fosa séptica de las triquiñuelas que, congratulémonos, destapan en lo posible y pese a todo nuestros cuerpos de seguridad apoyados por la justicia,, aunque falten más apoyos y ese se esperaba que fuera el papel de Podemos mientras no se anduvo por las ramas.
Pero Iglesias bajó el tono, se etiquetó como socialdemócrata lo que el votante interpretó como "se está volviendo casta", ensalzó la figura de Zapatero cuando creo que no hay español que no le consideré un pésimo presidente pese a algunos cambios notables que introdujo... mezclados con otros fallos garrafales.
Y por último Podemos va y saca un catálogo "a la sueca", símbolo inequívoco de una sociedad de consumo y no de una sociedad justa e igualitaria.
