Endika escribió:
La division entre el dominador y lo dominado (el observador y lo observado como diria schopenhauer creo jeje)es una ilusión de la mente o una creencia heredada por la sociedad, cuya realidad no es absoluta sino relativa, es decir tiene una finalidad practica de supervivencia que no tiene que ver mucho con sentir la paz o la plenitud. Es en la liberacion de esa demanda de dominacion, cuando rompemos la fractura que hay entre lo que somos y lo que creemos o queremos ser, para asi poder vivir de forma plena, sin estar fraccionados entre nuestro pasado, presente y futuro.

A ver, ejem...El dominador y el dominado tiene más que ver con Hegel que, en la "dialéctica del amo y del esclavo" ve un devenir de progreso de la Humanidad hasta llegar al "sentido último" del individuo que es el Estado; digo que tiene más que ver con Hegel que con Schopenhauer, que era un viejo sabio pero vitriólico y muy desengañado de la condición humana, pesimista y misántropo, partidario del autoritarismo : según él, debido al enorme egoísmo de la gente, es necesaria la mano dura por parte de las autoridades. Schopenhauer tenía dinero que heredó de su padre y su existencia puede definirse como "dinero en el banco y riqueza interior". Schopenhauer era enemigo ideológico de Hegel, de quien decía que ni él mismo entendía lo que decía. A pesar de la visión del Estado como absoluto sentido del individuo, Hegel fue partidario de la democracia y los nazis manipularon sus ideas para sus fines totalitarios.
En cuanto a lo de observador y lo observado tiene que ver con los conceptos kantianos de noumeno y fenomeno. Según Kant lo observado, el noumeno, es, en sí mismo (la
res in se) incognoscible y sólo tenemos acceso al fenómeno, es decir la imagen que aparece en la consciencia. Desde un punto de vista práctico las cosas "existen ahí fuera" pero desde la razón pura es claro que solo tenemos la información de los sentidos que el cerebro, la mente, interpreta, creando así el fenómeno, la representación mental. Las nociones de noumeno y fenomeno de Kant dieron origen a la fenomenología de Husserl que se propuso una verdadera "ciencia filosófica", ajena a la metafísica, a la ontología, que tuvieron influencia en filósofos posteriores como Heidegger y Sartre.
La liberación de los lazos perniciosos del recuerdo, de la experiencia presente o de la expectativa de futuro es cuestión más de la psicología que de la filosofía. No obstante hay muchas cosas en común en ambas disciplinas, Por ejemplo, la dimensión psicologista de la voluntad en Schopenhauer o Nietzsche, o la relación conflictiva con los otros, de Sartre. La integración en una individualidad ( es decir en juntar la división del yo fracturado como tú apuntas) la estudió Jung en lo que el psicólogo llamó "proceso de individuación". En todo conflicto hay, efectivamente, división.
La música de Beethoven, como la de tantos otros grandes, me gusta por su poder de sugestión y por la enorme cantidad de sentimiento y emoción que produce.