Supongo que esto os ha pasado a todos alguna vez, y me ha hecho pensar en unas cosillas, simples reflexiones que comparto.
Resulta que hay un músico que me encanta desde hace años, Amon Tobin. Hace 4 ó 5 años me hice con toda su discografía y me quedé alucinado con su música, algunos lo conoceréis. Bien, por aquel entonces sacaron nuevo disco, y lo escuché un par de veces y me quedé desencantado. No me gustó nada. Y no lo había vuelto a escuchar.
El tema es que ayer en otro hilo sobre amon tobin aquí en hispasonic, me hizo desempolvar sus discos y he estado a punto de escribir el siguiente comentario: "pero mira qué el último disco fue decepcionante." Pero en lugar de escribir esto, me he puesto a escucharlo. Por primera vez desde hace 3 años. Y me ha encantado. Al nivel de los anteriores, muy muy bueno.
Y entonces me ha reafirmado en una idea: qué injustas son las reseñas de críticos musicales, no? son opiniones sesgadas y fruto de un número de escuchas determinado, normalmente limitado, pero que como palabras escritas que son, quedan perpetuamente al alcance de cualquiera que quiera crearse una imagen previa de tal o cual disco. Cuando a lo mejor hasta es posible que ese crítico haya cambiado de opinión drásticamente con el tiempo.
Me ha hecho recordar otra anécdota. Hace unos años estaba leyendo crítica literaria sobre Julio Cortázar, y había un crítico literario coetáneo a Cortázar que criticaba su novela más importante, Rayuela, nada más salir esta a la luz. Y comentaba que la consideraba su obra más floja, que pensaba que iba a ser un fracaso y que no aportaba nada al mundo literario del escritor argentino. En la edición que yo leí había una nota a pie de página del mismo crítico, muchos años después, comentando que vaya cagada más gorda había hecho, que se había lucido.
Igual alguno de aquí de hispasonic sois críticos, y vuestra opinión será bienvenida, pero mi reflexión es: no tiene una gran parte de mentira el trabajo de crítico entonces? A mí me llegó una vez información privilegiada al respecto de un famosillo crítico musical español que reconocía que como no tenía tiempo para criticar todos los discos que quería (o debía) criticar, sólo escuchaba los primeros 30 segundos. Si el tema prometía, seguía escuchándolo. Si no, al siguiente. Y luego crítica destructiva al canto.
Qué os parece?
Resulta que hay un músico que me encanta desde hace años, Amon Tobin. Hace 4 ó 5 años me hice con toda su discografía y me quedé alucinado con su música, algunos lo conoceréis. Bien, por aquel entonces sacaron nuevo disco, y lo escuché un par de veces y me quedé desencantado. No me gustó nada. Y no lo había vuelto a escuchar.
El tema es que ayer en otro hilo sobre amon tobin aquí en hispasonic, me hizo desempolvar sus discos y he estado a punto de escribir el siguiente comentario: "pero mira qué el último disco fue decepcionante." Pero en lugar de escribir esto, me he puesto a escucharlo. Por primera vez desde hace 3 años. Y me ha encantado. Al nivel de los anteriores, muy muy bueno.
Y entonces me ha reafirmado en una idea: qué injustas son las reseñas de críticos musicales, no? son opiniones sesgadas y fruto de un número de escuchas determinado, normalmente limitado, pero que como palabras escritas que son, quedan perpetuamente al alcance de cualquiera que quiera crearse una imagen previa de tal o cual disco. Cuando a lo mejor hasta es posible que ese crítico haya cambiado de opinión drásticamente con el tiempo.
Me ha hecho recordar otra anécdota. Hace unos años estaba leyendo crítica literaria sobre Julio Cortázar, y había un crítico literario coetáneo a Cortázar que criticaba su novela más importante, Rayuela, nada más salir esta a la luz. Y comentaba que la consideraba su obra más floja, que pensaba que iba a ser un fracaso y que no aportaba nada al mundo literario del escritor argentino. En la edición que yo leí había una nota a pie de página del mismo crítico, muchos años después, comentando que vaya cagada más gorda había hecho, que se había lucido.
Igual alguno de aquí de hispasonic sois críticos, y vuestra opinión será bienvenida, pero mi reflexión es: no tiene una gran parte de mentira el trabajo de crítico entonces? A mí me llegó una vez información privilegiada al respecto de un famosillo crítico musical español que reconocía que como no tenía tiempo para criticar todos los discos que quería (o debía) criticar, sólo escuchaba los primeros 30 segundos. Si el tema prometía, seguía escuchándolo. Si no, al siguiente. Y luego crítica destructiva al canto.
Qué os parece?
