
Esto es que es así en todos los sectores, vamos de un extremo al otro y tú todo el día pensando: "ni tanto ni tan calvo, por favor".
A mi me ha tocado de cerca la ley de protección de datos, que para mi es un claro ejemplo. Antes podías hacer lo que te daba la gana con los datos de la gente, quedabas mal pero nadie podía decirte nada legalmente, ahora no puedes ni ir al baño sin autorización. Si un cliente me pide fotocopia de una factura que EL MISMO ha pagado, yo no puedo darsela sin autorización escrita del proveedor

; si nos personamos yo Y MI CLIENTE en un banco para abrir una nueva cuenta para el cliente, y el mismo cliente da una orden verbal de cambiar la domiciliación de los recibos a esa nueva cuenta, sin una autorización escrita se niegan a mover un dedo, osea que porque al tio que te atiende se le olvida darle la autorización para que la firme, luz, agua, ascensor, limpieza, nominas, etc, sin pagarse durante 3 meses, les importa un pito

; si me llaman de hacienda(¡¡¡de hacienda!!!!

) para pedirme datos de una persona a la que van a denunciar por fraude(que te lo dicen así mismo, no os creais), no puedo decirles ni si vive en el edificio, tienen que mandarme un requerimiento por escrito, porque si no me meten en un lío gordo a mi

; cosas así me están pasando ultimamente todas las semanas.
Saludos.