Como en la concepción de Santo Tomás que calificaba la diferencia entre los animales y los hombres por su cantidad, igualmente la voy a establecer yo entre músicas triviales, facilonas y la música culta; Ravel, el músico vasco, era un músico muy culto, un tardo impresionista que, junto a Satie y Debussy estaban musicando el caldo de cultivo de las vanguardias del siglo XX, de hecho, el bolero no es tan rupturista para estar publicada en 1928 y pone de manifiesto una vez más que la música culta no supo liberarse de ciertas ataduras formales hasta la mitad del siglo (con alguna excepción). Es verdad que la repetición de un motivo ("obra para orquesta sin música" se calificó al bolero) podía ser un precedente de músicas más informales, e , incluso, de la música repetitiva elecktro o house; pero Ravel es una afloración más del romanticismo, en concreto del Dandysmo (como lo fue Cernuda en la poesía del 27), por formación, por lenguage, por paradigmas, demasiado lejos de la trivialización y del "happy clubing", el uno se vale de un dominio del contrapunto y la fuga; los otros, los recientes, de su escasez de recursos musicales, de la repetición por falta, no por sobra.
Ravel era muy músico y los del dubstep, poco, y no aportan ni una brizna de novedad a la historia de la música (al menos el house sí).
Ravel era muy músico y los del dubstep, poco, y no aportan ni una brizna de novedad a la historia de la música (al menos el house sí).


nosotros seguiremos a lo nuestro al margen de tanta chorrada 