La puta tensión laríngea es lo que me mata.
Eso ha sido así de siempre. De toda la vida he cantado como el ojete; la primera vez que cogí una guitarra a mi padre -guitarrero de pro, que tuvo sus grupetes y sus pequeños éxitos- casi le da un chungo cerebral. Lo de oírme cantar ya es harina de otro costal, yo notaba como cada nota desafinada que daba era como una patada directa a sus cojones. De ahí que me convirtiese en "susurrador" o amante de cantar bajito y cuanto más escondido mejor.
Un día llegué a un ensayo de unos colegas que no tenían cantante y su música me gustaba mucho. Al final del ensayo, y después de haberme clavao un petón de hierba, les sugerí probar a pillar el micro e improvisarme algo. NUNCA me había oído tan fuerte como amplificado por el micro y el equipo que tenían, y la sensación que tuve fue totalmente nueva, diferente a cuando cantaba normalmente... era como si algo se liberase y sentía que la voz era elástica, no pesaba, era modulable y notaba la presión del diafragma y los agudos brillar... y no, no era el peta. Era liberarse de esa mierda de presión, de repente se habían activado movidas en mí que desconocía que tuviese. Justo al acabar la canción, sus caras y las mías eran tal que así
Mucho tiempo después te vas dando cuenta de que lo que te salió bien una vez, de repente no lo puedes hacer. De ahí que mi profesora de canto me dijese tantas veces que el canto ES UN EJERCICIO BASADO EN MEMORIZAR SENSACIONES e intentar reproducirlas después de quedarte con ellas. A veces dependemos de muchos factores para cantar, y es nuestro "deber" minimizarlos y tomar el control. En mi caso, los nervios me ocluyen la garganta, pero también el hecho de no estar con suficiente energía, no imaginar bien la nota que tengo que dar y demás cosas que impiden que des el tono correcto.
Todo este rollazo viene a decir que sí, que falla la garganta. Al menos ahora sé que es el camino a seguir... bueno, el camino por el que empezar, el problema es que soy un gandul extremo y no hago "gimnasia vocal", que creo que es lo único que realmente funcionaría para aprender, machacarse y machacarse...
¿cómo os entrenáis vosotros vocalmente? Porque en mi caso, el ensayo semanal no es ni mucho menos suficiente...
Un saludo y gracias por vuestros comentarios