Buenos días compañeros. ¿Podrías especificar qué modelo exacto de iMac tienes? En mi experiencia te puedo decir que le cambié a un iMac A1224 de principios de 2008 el disco duro por un SSD y al ventilador no le hizo gracia por lo que le tuve que instalar un monitor de temperatura para regular las revoluciones de ese ventilador. En cambio se lo puse a uno de mediados de 2011 en el segundo puerto SATA que lleva la placa y, claro está, que no dio ningún problema.
A ninguno de los dos les instalé ningún programa del estilo del Trim enabler y los dueños me han dicho que se encuentran satisfechos con la nueva velocidad de procesamiento a la hora de editar música (creo que usan el Logic y Ableton pero no me hagáis mucho caso que de música no entiendo).
Un saludo.
Pues en ese caso tu iMac está preparado para ponerle un disco SSD de más. Tendrías tres opciones:
- Añadir un disco SSD.
Ventaja: tendrías la velocidad del SSD para aplicaciones y la capacidad del disco duro para almacén de información.
Inconveniente: tienes que comprar los cables (40€) y sacar la placa base entera para conectarlos.
- Cambiar el disco duro por un SSD.
Ventaja: requiere menor manipulación.
Inconveniente: tienes que comprar un adaptador para que encaje en el hueco. Pierdes el almacenamiento interno del disco duro. Puede que la placa no sepa gestionar el disco SSD y tengas que instalarle un monitor de temperatura.
- Cambiar el lector óptico por un SSD.
Ventaja: requiere menor manipulación y mantienes el disco duro para almacén de información.
Inconveniente: tienes que comprar el data doubler para colocar el disco SSD. Pierdes el lector óptico (puedes meterlo en una carcasa externa que también tendrías que comprar). Puede que la placa no sepa gestionar el disco SSD y tengas que instalarle un monitor de temperatura.
Saludos.