vagar escribió:
que reducen partituras orquestales a vista. Verlos en acción es sobrecogedor.
Yo conocí a uno de esos bestias. Se llamaba (supongo que habrá muerto) Luis Muñoz y era arreglista en la casa de discos Belter creo recordar. Para los más jóvenes, decir que antiguamente se grababan los discos con músicos de verdad; podían grabar 30 ó 40 instrumentistas a la vez en una sala y prácticamente en una toma. Este tipo hacía arreglos para los cantantes de la época y me han contado que los hacía mientras veía la película de la tele. Al día siguiente te explicaba la peli y el arreglo sonaba.
El mejor pianista que he visto nunca es un tipo que tocaba en un restaurante de Barcelona. Se llamaba Pedrito Vázquez, el pobre no andaba muy fino pero le pedías cualquier canción sencilla y el tipo te hacía una puta obra maestra. Cuando sabía que alguien lo estaba escuchando, era algo de otro mundo.
Yo tuve la suerte de compartir escenario y, lo más importante, mesa y mantel, con algunos músicos de esta calaña. Joder, se las sabían todas, y no me refiero sólo a canciones, que también. Esos tipos no deberían morirse nunca y deberían dar conferencias en escuelas de música y no estar en el sofá esperando a que les llegue su hora. Alguno quedará, pero me temo que muy pocos.
Una anécdota que me explicaban era que cuando se presentaban a clase de piano, violín, o cualquier otra cosa, sin estudiar, el maestro les decía:
- ¿No has estudiado?. Vete a tu casa a estudiar y no vuelvas hasta que te sepas la lección.
Como ahora, vamos.