#21 Creo que has de aclarar ideas o aclarármelas; el fallo puede ser mío, de comprensión.
dario escribió:
Me temo que es cuestión de tiempo.
¿Dotar a una máquina de consciencia y necesidades? Deberíamos antes saber como nuestra consciencia apareció de la materia, o el origen de la vida. Pero hay lo que en ciencia se llama muro infranqueable. Del mismo modo que un ratón no distingue raíz cuadrada de logaritmo neperiano, el sapiens (que según Darwin forma parte del mundo natural, es decir, es un animal) tiene un techo cognitivo que seguramente está por debajo del umbral necesario para entender el tejido universal. Somos animales con límite. Sería importante entender esto si algún día queremos dar un paso en la dirección correcta.
dario escribió:
El contrapunto renacentista, por ejemplo, es un estilo de música con reglas muy claras; en ocasiones, se llega al punto de que uno debe seguir, de manera casi obligada, la melodía que marcan las propias reglas. Es decir, el pequeño fragmento melódico del que partes (también sujeto a reglas) comprende de algún modo el resultado final obtenido.
Matemática. Un lenguaje para expresar algo. ¿Sin necesidad expresiva habría lenguajes? Además, las reglas o ecuaciones que ahora parecen explicar algo, en el futuro se reformularán seguramente.
Volviendo a tu ejemplo; la regla no es lo único, ni lo más importante, del mismo modo que las normas del castellano. El lenguaje sin mensaje y sujeto no tiene sentido. La regla no puede ser el mensaje en sí; que podría, pero sólo si estás enseñando o aprendiendo. En la edad no tan temprana, la forma dominada debe servir para algo más, el mensaje. Incluso experimentando y dando con otras formas, el mensaje superficial sería un nuevo lenguaje, la nueva regla, pero no el mensaje profundo.
La necesidad o el mensaje de fondo, es la búsqueda constante de ese paso secreto por ese muro infranqueable para dilucidar el tejido del universo. Esa necesidad de buscar o estar más cerca de los dioses. Una máquina no tiene necesidades, ni consciencia de que hay un muro infranqueable, ni puede conmoverse, ni necesita dioses, ni quiere acercarse a ellos mediante lenguajes, ni puede inventar lenguajes nuevos, etc.
La máquina es una ramita para sacar termitas del termitero. El día que seamos dioses te daré la razón.