Creo que este hilo necesita revivir. Analizando, aprendiendo y no dejando en el olvido, lo que llevó a la genialoide (menudo palabro) que dio como fruto al gran maestro. Su esencia no llegó por sí sola a él mismo, es decir Bach es el ápice (la cúpula) de periodos de tiempo remotos, de los que somos responsables de conservar y de aquí mis palabras.
Bien, pues voy a comenzar por el principio, en la medida que pueda:
Bach no es un genio por sí mismo, sino una sucesión de hechos artísticos y musicales que debemos abordar poco a poco. Debemos trasladarnos pues centenas de años atrás. A sus padres, a nuestros padres musicales y del Arte.
Me siento responsable de que no se olvide el esfuerzo de estos hombres; centenares de años en los que grandes músicos como vosotros y yo (no lo digo para alagar, ni por humilde), dejemos morir por inconsciencia y desconocimiento estos siglos antigua belleza y que dan lugar a nuestra propia música.
¿Qué hago yo? me siento impotente ante el olvido. Veo cómo desaparece la hermosa música de hermosos hombres y lloro.
Toda nuestra música moderna, nuestro esfuerzo, aunque GRANDE; es una mota de polvo al lado de siglos de Arte y composición de hermosos y nobles hombres en su corazón. ¿Podemos dejar que se nos vaya de nuestras manos como el agua?. Me siento responsable de que esto no ocurra y os absorto, a los buenos músicos que leen estas palabras, a que no sea así. ¡Que no suceda esta ignominia!. ¡Sólo de pensarlo me da miedo!.
Ahora bien, si he llamado vuestra atención con estas palabras la pregunta es: ¿qué hacemos? ¿Nos olvidamos a nosotros mismos?
Al final sólo me queda pediros perdón por la intensidad de mis palabras y por responsabilizaros de algo que tampoco podéis evitar
Aun así... escuchad lo que se nos va de las manos y su belleza: